Reparación de Embarcaciones

in East Boston

Esta foto de 1928 tomada desde el agua muestra una embarcación en el varadero más grande con dos vías para embarcaciones de hasta 2000 toneladas – el más cercano de los varaderos que se divisan delante. En aquella época, este varadero era el más grande de Boston y el segundo más grande del país. La compañía Crandall Dry Dock Engineers diseñó y construyó los varaderos en este sitio y trasladó sus oficinas aquí en 1891.

Photo courtesy of MIT Museum

En este sitio, astilleros de última generación brindaron servicios de reparación y mantenimiento de 1854 a 1950. En 1858, la compañía East Boston Dry Dock Company, de la cual Samuel Hall era dueño, incluía un muelle seco flotante con propulsado con vapor y capaz de levantar embarcaciones de 500 toneladas. Su varadero de 600 pies de largo tenía una cuna de varada con una capacidad sin precedentes de 1000 toneladas. Más tarde se construyeron varaderos con capacidades de 1500, 2000 y 2500 toneladas. Todos fueron construidos por la compañía Crandall Dry Dock Engineers.

Frente a usted, se encuentran restos de los varaderos construidos en 1890 y 1892. Cuando una embarcación requería reparaciones, se la colocaba sobre una cuna o soporte de madera que descansaba sobre rodillos de hierro fundido que rodaban sobre vías férreas. Una vez asegurada la embarcación, se la levantaba por las vías hasta pasar la zona de la marea alta.

Dos factores que contribuyeron al éxito del astillero fueron su diseño innovador y la simplicidad de operación con un mínimo de mano de obra. Avances de esta época industrial tales como cadenas de hierro forjado y tornos de vapor reemplazaron a las cuerdas, los hombres y los caballos. A pesar de las crisis económicas, un devastador incendio costero en 1861 y el deterioro de la construcción naval local, la reparación de embarcaciones prosperó aquí y a lo largo de la calle Marginal.

East Boston Dry Dock Company stock certificate

La Compañía East Boston Dry Dock Company se estableció en 1847 y fue adquirida en 1902 por la compañía Atlantic Works. El dibujo en el certificado bursátil podría ser un corte transversal de un muelle seco patentado y construido por Phineas Burgess.

Photo courtesy of the Boston Athenaeum

East Boston Dry Dock Company ad

Publicidad de East Boston Dry Dock Company.

Photo courtesy of the Massachusetts Historical Society

An 1892 map that shows the location of the two marine railways that had just been completed

El mapa de 1892 muestra la ubicación de los dos varaderos recién construidos. Se extienden cientos de pies en las aguas del puerto.

Detail from map by G. W. Bromley & Co. Reproduction courtesy of the Norman B. Leventhal Map Center at the Boston Public Library

Crandall Dry Dock Engineers' premier diver, George Landrigan

George Landrigan, el principal buzo de la compañía Crandall Dry Dock Engineers ayudaba a construir, inspeccionar y mantener los segmentos submarinos de los varaderos. También ayudaba con el varado de las embarcaciones. Aquí esta con su asistente, quien dirigía sus movimientos y supervisaba su seguridad.

Photo courtesy of the University of Vermont Bailey Howe Library, Special Collections

Ubicación del Cartel

Más…

Over the course of 150 years, under five generations of Crandalls, the company rose to national and international prominence in the marine railways industry. Crandall Dry Dock Engineers (whose name changed though it always included “Crandall”) has built more than 250 marine railways in the United States, Canada, & abroad.

http://www.crandalldrydock.com/history_new.htm

The development of modern marine railway technology in the early 19th century dramatically changed the nature of shipbuilding and repair. It became possible for smaller shipyards with fewer financial resource to compete with larger ones that could afford to build expensive dry docks, like Dry Dock #1 in Charlestown Navy Yard. Constructing a marine railway cost about one-tenth of constructing a basin dry dock. Moreover, a marine railway was simpler and cheaper to operate. A marine railway’s principal advantages: 1) a vessel could be hauled quickly; 2) the railway track could be fitted to the natural slope of the shore; 3) a vessel could be transferred to and from the shore with relative ease; 4) if the vessel was a little longer than the cradle, it didn’t matter; 5) it was easy for workers to access and work on the vessel.

(adapted from the Public Archaeology Laboratory, Inc. Report #3333, January 2018. lnw)

The two-track marine railway visible from the Harborwalk on the right had a 250-foot-long cradle. The marine railway on the left had one that was 135 feet long. Almost half of the longer cradle was recovered during site work in 2017 and 105 feet of the 135-foot cradle. However all the remains were badly deteriorated.

Both marine railways visible at the site underwent several reconditionings in their 60 to 90 years of service. They were among the longest-working marine railways in the country. The typical “life-span” of a railway was 25 years.

(adapted from the Public Archaeology Laboratory, Inc. Report #3333, January 2018. lnw)

Atlantic Works was founded in 1853 by machinists from Otis Tufts’ machine shop on Summer Street, where Clippership Wharf now stands. They built boilers and marine engines for steamships. After Atlantic Works acquired East Boston Dry Dock Company, it became the largest private ship repair facility in Boston. In 1922 it merged with the Bertelson & Peterson Company and added a large steel floating dry dock to the facility. In 1928, Atlantic Works was purchased by Bethlehem Shipbuilding Corporation, who had already purchased Simpson Dry Dock along Marginal Street a few years earlier. Bethlehem sold this shipyard about 1950 but continued to own the former Simpson yard until 1982.

lnw June 2018

Activistas comunitarios. Ley colonial. Voluntad política. Nuevas reglamentaciones estatales. Esta combinación permitió la creación del Boston Harborwalk, un camino público de 43 millas de longitud que se extiende desde el aeropuerto Logan hasta el río Neponset a lo largo de siete barrios. En 1978, la Oficina de Manejo de Zonas Costeras de Massachusetts (Massachusetts Office of Coastal Management o CZM) se fijó el objetivo de mejorar el acceso público a la costa. Lograron hacerlo a través de la integración de viejas leyes coloniales en nuevas reglamentaciones estatales.

En las décadas que siguieron, activistas comunitarios, el gobierno de la ciudad y del estado y las empresas constructoras a cargo de proyectos en la costa han trabajado en forma conjunta para garantizar la construcción del Harborwalk a lo largo de la costa. Algunos sitios también ofrecen servicios públicos, como baños, lugares de reunión, rampas para kayaks, etc. El resultado es un fabuloso camino que permite a residentes y visitantes recorrer nuestro activo y limpio puerto.

Las viejas leyes coloniales establecieron el derecho público de acceso a las tierras que están sumergidas cuando la marea está alta con el fin de permitir la pesca, la caza y la navegación a lo largo de la costa. Estas leyes se remontan a tiempos aún más antiguos: Se derivan del derecho romano, que se incorporó al derecho inglés y fue traído a Massachusetts por los colonos ingleses. Luego, en la década de 1640, la Colonia de la Bahía de Massachusetts aprobó leyes que permitían la creación de muelles privados en la zona intermareal (la zona entre la marea alta y la marea baja), siempre que se conservara el acceso público. Casi toda la costa de Boston consiste de terrenos rellenados que antes habían sido parte de la zona intermareal. Esto, junto con el derecho legal de acceso que existe desde hace siglos, sirvió de base para las reglamentaciones de la CZM de 1978.

Recursos (en inglés)

  • Public Archaeology Laboratory, Inc. Report t #3333 for Boston East, January 2018.
  • Seasholes, Nancy & The Cecil Group. Sites for Historical Interpretation on East Boston’s Waterfronts. Boston: Boston Redevelopment Authority, 2009.
  • Seasholes, Nancy. Gaining Ground: A History of Landmaking in Boston. Cambridge, MA: The MIT Press, 2003.
  • Sumner, William H. History of East Boston: With Biographical Sketches of its Early Proprietors, and an Appendix. Boston: William H. Piper and Company, 1858.

Agradecimientos (en inglés)

  • Translation and recording thanks to the generosity of the Boston Marine Society
  • Our gratitude to the Perkins School for the Blind and David W. Cook for their partnership in creating the audio files.